Hablemos de las relaciones sexuales y la intimidad
Quizás ya hayas tenido las clases de educación sexual en la escuela, las charlas sobre "¿quién lo ha hecho?" con tus amigas y la conferencia sobre la importancia de la anticoncepción (gracias, padres). Pero independientemente de que lo hayas hecho o no, sabrás que tener relaciones sexuales va más allá del cuento de la semillita. Lo que intentamos aquí es que conozcas tu cuerpo y sepas qué es la virginidad y la sexualidad.
¿Por qué estoy excitada?
Ya hemos escrito acerca de por qué durante la pubertad tendés a pensar más en el sexo aquí. Por lo general se siente bastante bien, desde el revoloteo interior cuando ves a alguien que te atrae, hasta las ganas y el deseo mucho más profundo que sentís cuando pensás en acercarte a otra persona.
¿Es normal mi vagina?
Así como hay miles de apodos para la vagina –como cachucha, concha, pochola, almeja, cotorra–, hay también miles de formas distintas. La mitad de la población tiene una, y es la parte más íntima de tu cuerpo. Lo que resulta sorprendente es que un estudio reveló que solamente el 56 % de las mujeres sabía ubicar la vagina en un dibujo (ver debajo).
Hay muchas razones para decir que las vaginas son importantes (el sexo, el placer y tener bebés, son las más obvias). No permitas que la tuya sea una desconocida. Enterate de cómo es, cómo huele y cómo se siente. Hablamos de que te familiarices con tus partes frente a un espejo aquí.
Una vez que conozcas a tu vagina en su estado habitual, podrás darte cuenta cuando ocurre un cambio. Un olor distinto en ciertas etapas del ciclo es generalmente normal, pero si el olor es más fuerte o si aparece alguna erupción, es una buena idea que visites al médico para ver si está todo bien. Podrás sentir vergüenza, pero recordá que los médicos ven cuerpos todos los días, así que no pasa nada si examinan tus partes íntimas y tus lolas.
¿Es normal que las chicas adolescentes se masturben?
¡Sí! Aunque sin duda no se habla tanto de eso como de los chicos que lo hacen. Esto tiene mucho que ver con el tabú, y la idea anticuada de que las chicas no tienen los mismos deseos sexuales intensos que los varones.
Masturbarse (o tocarse/hacerse la paja) es una muy buena forma de conocerse el cuerpo. Una vez que descubras lo que te gusta, vos misma te podrás satisfacer sexualmente. Y ese es un gran hallazgo.
Descubrir vos misma lo que te causa placer mejora tus experiencias con otra persona. ¡Explorá! Algunas cosas, como tocarte los pezones o hacerte cosquillas detrás de las rodillas (hasta los lóbulos de las orejas pueden ser sexy), producen a veces sensaciones sorprendentemente agradables.
¿Todas las personas pueden tener un orgasmo?
Sí. Pero si todavía no tuviste uno, no pienses que estás haciendo algo mal. Lo más importante es que intentes disfrutar de cualquier cosa que hagas. Aprender a acabar te puede llevar tiempo, práctica y paciencia.
Pensá que conocer tu cuerpo (y las cosas que te gustan) es como aprender a tocar un instrumento. Tocar directamente una pieza completa sería imposible.
Y, si estás con otra persona, nunca te sientas presionada a tener un orgasmo solo para complacer al otro. Además, no pienses que vos sos quien tiene que hacer gozar; los dos deben gozar y disfrutar de tener sexo. Así que si no lo sentís, no lo finjas.
¿Cuál es la edad ideal para perder mi virginidad?
Es simple; cuando estés preparada. Sería fantástico venir al mundo con un manual que nos indique cuándo debemos hacer todas estas cosas importantes de la vida.
Pero, como todo lo que no tiene un momento "justo" obvio, cuándo lo hacés (y con quién) tiene que ver más con cómo te sentís. Las amigas pueden ser una gran influencia. Si todas lo hacen y vos no, es muy probable que te sientas dejada de lado. Pero nunca sigas adelante con algo para lo que no estés preparada.
Preguntate a vos misma: ¿Realmente tengo ganas o solo quiero hacerlo de una vez para salir de esto? ¿Me siento cómoda con esta persona? ¿Me respeta? ¿Estoy preparada para compartir algo tan íntimo? Si te cuesta contestar estas preguntas, probablemente no estés preparada para tener sexo.
Hay muchas otras formas de pasarla increíble con tu pareja, como el sexo oral, por eso no pienses en el acto sexual como el evento principal. Recordá también que las enfermedades de transmisión sexual (ETS) se pueden contagiar de todos modos, así que usá protección.
A veces me gustan las chicas
Tratar de entender quién te gusta puede ser un poco confuso a veces.
Quizás lo sepas con seguridad, pero también es posible que no lo sepas. Lo importante es que nadie te está pidiendo que digas tu preferencia y que te mantengas con eso por el resto de tu vida. Especialmente cuando están cambiando tantas cosas, y tan rápido, en tu cuerpo y en tu mente.
Conversar con otros, compartir tus sentimientos y escuchar sus experiencias te ayudará a descubrir quién sos, qué querés y cuáles son las cosas de las que disfrutás. Cuánto más lo hagas, más sincera serás contigo misma, en vez de querer siempre complacer a los demás. Tenemos muy buenos consejos sobre cómo hablar de tus verdaderos sentimientos aquí.
Quiero decir que no, pero pienso que voy a quedar como una maleducada.
Decir que no, no es un insulto. Es una opción, y podemos elegir lo que es correcto para nosotras. "No" no es siempre una palabra negativa; nos ayuda a crear límites positivos tanto para nosotras mismas como para nuestros cuerpos.
Cuando se trata de sexo (o lo que sea, en realidad), un "no" puede llegar a ser más difícil de decir –o de aceptar– que un "sí". Pero tu "no", y el de los demás, siempre debe ser respetado. No importa si antes fue un "sí". No importa si alguien cambia de idea y un "sí" de repente se convierte en "no". "No" significa "no".
Podría ser útil practicar decirte "no" a vos misma frente al espejo, de modo que si surge una situación delicada, habrás tenido la oportunidad de decirlo en voz alta. La palabra debería salir de la boca con mayor facilidad una vez que la hayas ensayado.
Y si alguien te dice "no", tratá de no tomártelo tan a pecho (sabemos cómo esa palabrita a veces puede sentirse como una trompada en el estómago). Todos deberíamos tener la confianza de poder ser sinceros. Un "no" puede querer decir que la persona con quien estás aún no está preparada para hacer algo para lo que vos sí estás. No es un rechazo hacia vos como persona.
Estar en intimidad requiere práctica
Aún cuando ya estamos hace un tiempo con alguien, hacer cosas íntimas juntos puede resultar difícil. No es solo el hecho de quedarse desnudos lo que puede incomodar. Algunas cosas cotidianas, como comer o hacer ejercicio frente a otra persona que nos gusta, pueden ponernos nerviosas.
Para tener relaciones más significativas con otras personas es necesario que seamos nosotras mismas. A veces, bailar con alguien que te gusta, o sentarte a su lado, o llamarlo para charlar, puede ayudarte a tener más confianza en vos misma, sea cual sea la situación. Si tomás la iniciativa, tal vez te sorprenda la confianza que tenés dentro de vos.
¿Cómo puedo estar protegida durante el sexo?
El mejor sexo es siempre seguro. Antes de hacerlo, ¿te preguntaste si te sentís cómoda y estás preparada? ¿Ya pensaste sobre la mejor forma de cuidarte para evitar enfermedades de transmisión sexual (ETS) o embarazos no deseados? Estas son solo un par de señales que sugieren que estás cuidando tu salud y tu bienestar mental.
Sea lo que sea que quieras probar, lo más importante es poder charlarlo con la persona con la que planeás tener relaciones sexuales. No hay una manera correcta o incorrecta de tener relaciones sexuales, pero si no podés tener una conversación sincera sobre qué tipo de protección van a usar, entonces tal vez no sea la persona correcta.
Existen clínicas de salud sexual creadas específicamente para que los adultos jóvenes discutan todo tipo de temas relacionados con las relaciones, y sobre cuál es el anticonceptivo más adecuado. Buscá en Google las clínicas más cercanas. Y, por supuesto, no se puede dejar de lado el consejo de un padre, una madre, una tía, una hermana o el de un amigo con más experiencia.
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