Cómo utilizar una toalla femenina para la menstruación

¿Es la primera vez que utilizas una toalla? ¿No sabés cuál es la mejor manera de usarlas? No te preocupes. Tenemos todo lo que necesitás saber para empezar a utilizarlas y su funcionamiento.


Si acabas de empezar a tener la menstruación, una de las primeras cosas que debes tener en cuenta es cómo utilizar las toallas. Si no estás segura de cómo usarlas, nuestra guía te explicará todos los detalles. 


Vamos a aprender juntas cómo usarlas para que estés totalmente preparada.

¿Cómo funcionan las toallas femeninas?

Las toallas para la menstruación funcionan absorbiendo el flujo menstrual a medida que sale del cuerpo. Tienen un lado suave y absorbente que se coloca junto a tu vulva, y un lado pegajoso que le permite mantenerse en su sitio pegado a tu ropa interior habitual. La mayoría de las toallas pueden aguantar unas horas y debes cambiarlas por otras nuevas a lo largo del día. 


Puedes usar cualquier tipo de ropa interior que te guste cuando estés con la menstruación, aunque muchas personas prefieren sus pares más cómodos durante este periodo para lidiar mejor con cualquier dolor o hinchazón.

¿Dónde conseguir toallas para el periodo?

Puedes comprar productos para la menstruación en todo tipo de lugares, como el supermercado, la farmacia o la tienda de la esquina. Las toallas para la menstruación son bastante populares por lo sencillo que es utilizarlas, así que podrás encontrarlas fácilmente. Suelen estar colocadas con otros productos sanitarios, a veces bajo un cartel de "Protección sanitaria" o "Cuidado femenino". 


Si no puedes permitirte los productos para la menstruación por cualquier motivo, también hay formas de conseguirlos gratis, como por ejemplo a través de organizaciones benéficas, proveedores de servicios sanitarios o incluso tu escuela. Intenta buscar en Internet para ver qué hay disponible en tu localidad. 


Recuerda que si alguna vez necesitas una toalla pero no puedes ir a comprarla, puedes pedirla a la gente que te rodea. Tal vez una amiga te pueda prestar uno o dos. Si estás en el colegio, también suelen tener toallas para los alumnos; sólo tienes que pedírselas a tu profesor o dirigirte a primeros auxilios. A veces puede resultar un poco embarazoso sacar el tema de la menstruación en el colegio, pero recuerda que tus profesores estarán encantados de ayudarte a conseguir lo que necesitas. La menstruación es algo natural que le ocurre a mucha gente, incluso a algunos de tus profesores, así que no hay nada de qué avergonzarse.

¿Qué tipos de toallas existen?

Hay muchas toallas diferentes entre las que elegir. Algunas tienen alas, lo que significa que tienen lengüetas adicionales a los lados que envuelven tu ropa interior para asegurar una mayor sujeción. Aunque son estupendas y pueden hacer que te sientas más segura, algunas personas prefieren las toallas sin alas. 


También hay diferentes grados de absorción: las palabras o el símbolo del paquete te indicarán la cantidad de sangre que pueden contener. Si el sangrado es leve, puedes utilizar un absorbente ligero. Una toalla más absorbente será mejor en los días en que el sangrado sea más abundante (lo que también es totalmente normal) o por la noche. 


Para las noches de la regla, utiliza una toalla de noche para no tener que preocuparte de interrumpir el sueño para cambiarte. Las toallas nocturnas para la menstruación están especialmente diseñadas con un acolchado extra cómodo para absorber el líquido y amortiguar tu zona V durante toda la noche. 


Si quieres saber más sobre las toallas para el periodo y otras formas de llevarlo, como los tampones, la ropa interior para el periodo y las copas menstruales, tenemos una guía completa sobre cómo elegir el mejor producto para el periodo.

Cómo ponerse una toalla para el periodo

Así que tienes la menstruación y estás preparada con la toalla que has elegido. ¿Qué es lo siguiente?


1.En primer lugar, anda a un lugar donde te sientas cómoda para ponértela. Puede ser en el baño de casa, en tu habitación o en un cubículo de los servicios de tu colegio.


2.Asegúrate de lavarte las manos antes de empezar.


3.Verás que la toalla está pegada a un envoltorio externo protector que la mantiene limpia y lista para su uso. Despega la toalla de este envoltorio.


4.Bájate la ropa interior y coloca el lado pegajoso de la toalla hacia abajo en la parte central conocida como fuelle (el trozo de tela que suele tocar la vulva). Si no estás segura de cuál es la parte delantera y la trasera de la toalla, puedes consultar las instrucciones del paquete. Normalmente hay una forma dibujada en su superficie que te ayuda a averiguarlo.

¿Qué ocurre si tu toalla tiene alas? Entonces sólo tienes que seguir un par de pasos más.


-Empieza por despegar la tira protectora que hay detrás de cada ala.


-A continuación, envuelve las alas alrededor de tu ropa interior para que queden pegadas en dirección contraria a tu cuerpo. Es posible que se superpongan, lo que también está completamente bien.

Y ya está.


5.Una vez que estés contenta con la posición de tu toalla, puedes seguir adelante y subir tu ropa interior. No importa si la almohadilla no está colocada perfectamente la primera vez o si acaba ligeramente torcida. Siempre puedes probar cómo se siente y luego reajustar. La toalla debe ser cómoda de llevar hasta el punto de que apenas se note nada.

Cómo cambiar y tirar las toallas del periodo

Una vez que hayas dominado los pasos para ponerte una toalla, cambiarla no debería suponer ningún problema. Lo único que tienes que recordar es que debes cambiarla aproximadamente cada 4 horas durante el día, dependiendo de tu flujo. Si no estás segura de sí es el momento, prueba a comprobarlo cuando vayas al baño: si tu toalla empieza a estar llena, probablemente sea una buena idea cambiarla por otra. 


Para cambiar la toalla, basta con despegarla de la ropa interior, tirar la toalla usada a la papelera (¡nunca al retrete!) y sustituirla por otra nueva. 


Puedes utilizar el envoltorio de la nueva toalla para empaquetar la usada antes de tirarla. Con la tecnología enrolla, presiona y listo, sólo tienes que enrollar tu toalla usada en el envoltorio fácil de usar de tu toalla nueva y sellarlo presionando los lados. Esto te permite deshacerte de tu toalla usada de forma higiénica y discreta, manteniéndola sellada de forma segura y lista para ser tirada a la basura cuando tengas la oportunidad. 


El uso de una toalla para la menstruación no tiene por qué suponer un problema para ti. Sólo hace falta un poco de práctica, pero no tiene por qué ser nada secreto. Al fin y al cabo, la menstruación es un proceso natural y normal, por lo que hay que hablar abiertamente de ella. Considera la posibilidad de plantear cualquier pregunta que tengas a miembros de tu familia, amigos o simplemente a alguien en quien confíes. Después de todo, es probable que muchos de ellos también tengan alguna experiencia con la menstruación. También puedes encontrar más información útil en nuestros artículos sobre la primera menstruación.

Descargo de responsabilidad médica

La información médica contenida en este artículo se ofrece únicamente como recurso informativo, y no debe utilizarse ni utilizarse con fines de diagnóstico o tratamiento. Consulta a tu médico para que te oriente sobre una condición médica específica.

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